Con la llegada de la archienemiga eterna de las mujeres y personas con vagina, la menopausia, llegan los cambios que suelen no gustarnos. Cambios físicos, insomnio, alteraciones del humor, tendencia a la depresión… Cada persona puede llegar a sufrir estos síntomas de una manera totalmente distinta y en diferentes intensidades.
Uno de los cambios más comunes de la menopausia que pasa desapercibido, es la sexualidad de la mujer/personas con vagina en esta etapa de la vida. No se habla de ello por la tendencia a creer que al terminar la vida reproductiva, también acaba su vida sexual. Que no te engañen, muchas reconocen que sus mejores relaciones íntimas han sido de los 50 a los 60. Te explicamos cómo.
Síntomas de la menopausia
Te darás cuenta de que la menopausia está al caer cuando detectes ciertas irregularidades en tus ciclos menstruales, como mínimo durante 12 meses. Por lo que te recomendamos tener paciencia y sobre todo no anticiparte y seguir tomando precauciones.
Al reducirse los niveles de producción de las hormonas femeninas (estrógeno), lo más común es que aparezcan sofocos repentinos e intensos. Con ellos, te costará conciliar el sueño. Y ya sabes las consecuencias que tiene no dormir bien: fatiga, irritación… Pero esto no acaba aquí: las personas cerca de la menopausia tienden a la ansiedad o incluso a la depresión al tener que adaptarse a tantos cambios físicos (sensación de hinchazón del abdomen, dolores en los ovarios, cansancio, dolores de cabeza…) y psíquicos (cambios en los estados de ánimo…) en tan poco tiempo.
En conclusión, estos síntomas pintan un escenario de la menopausia muy, pero que muy feo. Y no vamos a intentar convencerte de lo contrario. Solo queremos facilitarte algunas pautas y consejos adecuados para que consigas tratar a la menopausia como una aliada y sacarle ventaja. Como el dicho: mejor tener al enemigo cerca.
Cómo afecta la menopausia al sexo
Como es de esperar, el cambio hormonal que implica la menopausia afecta principalmente a todo tu aparato genital y, en consecuencia, a tus relaciones sexuales. ¿Pero dónde y cómo exactamente?
Se reduce el deseo sexual: sequedad vaginal, reducción de la libido y debilitación del suelo pélvico.
La sequedad vaginal, la reducción de la libido y la debilitación del suelo pélvico pueden reducir tu capacidad de sentir placer con el sexo al alcanzar la menopausia, pero no te impiden practicarlo. Si crees que tener sexo no te conviene o no es posible, no estás en lo cierto. Busca aquí todos artículos de nuestro sexshop online.
Tampoco debes sentir vergüenza del envejecimiento de tu cuerpo y de los cambios físicos que estás sufriendo. Como tú, todas las personas de la Tierra envejecemos. Pero si no acabas de sentirte a gusto puedes acostumbrarte a tu cuerpo mirándote al espejo, posando sexy y excitándote a ti misma. Así te será más fácil desnudarte como lo has hecho hasta ahora.
Ventajas de la menopausia: en la menopausia las relaciones sexuales se experimentan con más placer
Muchas personas que han pasado por la menopausia dicen sentirse más seguras de sí mismas y vivir su vida de una manera más relajada. La imposibilidad de quedarse embarazada hace que vivas el sexo más libremente. También, si eres madre, notarás que tienes menos cargas familiares y podrás dedicar mucho más tiempo a tu intimidad.
Y no pierdas la esperanza, siempre nos quedará el órgano más erógeno del cuerpo que siempre consigue avivar la llama del deseo: el cerebro.
Para concluir con este apartado, te adelantamos que cuantas más relaciones sexuales tengas antes de llegar a la menopausia, más ganas seguirás teniendo en un futuro.
Recomendaciones
Sabiendo que tarde o temprano, la menopausia llamará a tu puerta, lo que debes hacer es ir preparando tanto tu cuerpo como tu mente para sacarle ventaja.
Trabaja el suelo pélvico
Tengas la edad que tengas, puedes empezar a hacer ejercicios Kegel con bolas chinas, ya que fortalecer esta zona te ayudará a disminuir los efectos que conlleva no prestarle atención a tu suelo pélvico: incontinencia urinaria y fecal, prolapso (decaída) de los genitales, entre otros.
También es igual de importante hacer ejercicio físico de forma regular (de jóvenes y no tan jóvenes) para mantenerse en forma y así asegurarte una mejor calidad de la vida sexual en edades más avanzadas.
Ayúdate con lubricantes
El sexo en la menopausia resulta mucho más complicado debido a la disminución de la lubricación natural. Pero ello no quita que no puedas recurrir a la amplia gama de lubricantes que existe actualmente, donde puedes encontrar desde los lubricantes más naturales (de agua, aloe vera…) hasta lubricantes de sabores (frutos rojos, frutas exóticas, nube de azúcar…).
Un dato curioso: cuantas más relaciones tengas a lo largo de tu vida sexual, menos disminución de lubricación tendrás.
Alimentación equilibrada
El dicho de “Somos lo que comemos” se refleja más que nunca en esta etapa. Puedes recurrir a alimentos que contengan estrógenos con algo tan sencillo como los guisantes, manzanas o aceitunas, entre muchos otros. Si te alimentas de una forma nutritiva y equilibrada notarás que tienes más energía mental y física, y estarás con muchas más ganas de tener relaciones sexuales.
Recurrir a fantasías y al uso de juguetes sexuales
Por historia, la sociedad nos arrastra a pensar que la gente mayor no puede o no debe pensar en cosas excitantes. Pero, ¿Consideras que tu imaginación ha envejecido? Más bien lo contrario, gracias a haber tenido más experiencias sexuales, verás que tienes mucha más imaginación en este terreno. Pero si a la hora de la práctica el cuerpo no acaba de responder, incorporar juguetes sexuales en las prácticas sexuales te ayudará a completar tu placer.
Uno de los juguetes más prácticos, ideal para esta edad donde es más difícil alcanzar el orgasmo, es el succionador de clítoris. Este juguete rodea tu clítoris para estimularlo con intensas ondas de presión y pulsación de hormigueo. El 83% de las mujeres y personas con vagina que lo han probado aseguran no haber probado nada igual y que en tan solo 2 minutos han tenido un orgasmo con este juguete. Además de poder usarlo en la ducha, este estimulador estará a tu servicio cuando quieras gracias a su cargador. Mira nuestra sal de baño y piensa en esa ocasión especial y elige bien.
Y esto es todo, lo bueno y no tan bueno, sobre el sexo en la menopausia. Toma nota de nuestros consejos y ¡Disfruta de sus beneficios!