Sexo Tántrico

El sexo tántrico es una antigua práctica espiritual que busca la conexión de las almas a través de la unión de los cuerpos. Seguramente, al menos una vez en tu vida, has oído hablar del sexo tántrico y te ha sonado a un catálogo de difíciles posturas o te haya parecido aburrido, lento, y que encima omite lo mejor de una relación sexual: el orgasmo.

¿Y quién quiere perderse un orgasmo? Algunos de esos prejuicios son ciertos. Hay algo de verdad en ellos pero también mucho mito y bastante desconocimiento en torno al tantra que, más que una técnica, es toda una forma de vida aunque sí tiene el objetivo de mejorar la vida sexual. Visita y descubre todos los artículos de nuestro SexShop.

¿Qué es el tantra?

El tantra es un antiguo conjunto de conocimientos de la filosofía hindú y también del budismo tibetano, es una práctica milenaria de yoga que abarca en forma integral todas las dimensiones del ser humano. Le otorga una una importancia central a la práctica sexual que es una de las expresiones humanas que elevan la energía, por lo que cuanto más perfecta y sublime sea la experiencia, más oportunidades de que el practicante crezca en su camino espiritual.

Su esencia es que el sexo es una vía para expandir la energía y por eso, las técnicas y herramientas de manejo corporal son tan importantes. Con la respiración, caricias y masajes, el manejo del ritmo y la consideración de la otra persona, la energía se expande y se intercambia para potenciar la experiencia del encuentro.

No es que el orgasmo no sea importante, sino que una descarga temprana de la tensión impide alcanzar los niveles más altos que se buscan. Por eso el foco no está puesto en alcanzar el orgasmo, sino en el disfrute de cada uno de los muchos y largos intercambios que suceden entre las dos personas.

Cuatro rituales tántricos

1. Adoración. Trata a tu compi de juegos como un ser sagrado. Adórala, admírala, reconócela. Conviértete en sirviente de su placer. Estás ahí para hacerla sentir bien. Que esta actitud se revele en la forma en que lx miras, lx acaricias, lx agasajas, no le des órdenes, ponte a su servicio. Y lo mismo hará contigo. Esta es una predisposición que no implica una relación amo-esclavo, es todo lo contrario del BDSM. Cada cual va a tratar al otro con adoración
2. Masajes. Pueden ofrecerse de manera alterna masajes descontracturantes primero, eróticos después, varias veces durante el encuentro. Sin prisa, sin exigencias, simplemente intercambiando el turno entre quien da y recibe placer. Por ejemplo, puedes pedirle a tu compi de juegos que te dé un masaje en los pies durante unos minutos, y luego se lo devuelves, en los pies o en la zona que prefiera. Está permitido orientar amablemente con indicaciones lo que a cada cual le gusta.
3. Podéis pedir más o menos presión, que vaya para tal zona, y, cuando sea el turno de dar el masaje, seguir también las indicaciones que se puedan recibir en el momento. La humildad es esencial en esta práctica, es una forma de aprender a ser mejor “amante”. Y viceversa, por supuesto…
4. Escucha corporal. Concéntrate en sentir qué te pasa mientras se mueven los cuerpos juntos. Y trata de no juzgar ni compararlo con experiencias pasadas, solo “escucha” lo que estás sintiendo en ese momento. No pienses en el orgasmo, si aparecen las sensaciones déjalas fluir, sin apurarlas ni esperar que la otra persona lo tenga, no ayudes si ves que se aproxima a él. Disfrutad juntos (pactadlo previamente) del goce de mover los cuerpos como si estuvierais bailando, es un ejercicio para conocerse y aprender a escuchar el propio cuerpo y el de la otra persona. Esta es una manera de poner el cerebro en modo neutral y dejar de lado el pensamiento. Así, cuando el orgasmo llegue finalmente, lo experimentaréis con mucha más intensidad.
5. Postura yab yum. Es la posición sexual básica del tantra, la más recomendada para principiantes ya que facilita una gran estimulación y energía que recorre todos los chacras. Busca la fusión y el despertar de la ternura y el amor.

¿Cómo se hace el yab yum?

• Sentados. La persona con pene se sienta con las piernas cruzadas en el suelo y la persona con vulva se sienta sobre sus muslos rodeándolo con las piernas y con los brazos alrededor del cuello, quedando entrelazados.
• Miradas. Hay que mirarse intensamente a los ojos y tratar de leer lo que la otra persona siente en su interior.
• Beso. Incluid un beso apasionado y prolongado.
• Balanceo. Mientras os besáis, comenzad a balancearos suavemente, afirmándose solo con los brazos y recorriendo con las manos el cuerpo de la otra persona al mismo tiempo, sin dejarse ningún rinconcito.
• Caricias. Permaneced sentados, sin penetración, y masajearos y acariciaos.
• Penetración. En el momento de la penetración, tratad que sea suave y lenta, manteniendo la misma postura del principio. Después, la persona con vulva subirá sus piernas sobre los codos de su compi de juegos para facilitar una penetración más profunda.
• Ajuste de postura. Para mayor comodidad, también podéis sentaros sobre almohadones. Desde la posición inicial podéis buscar posiciones más relajadas, por ejemplo, se pueden estirar las piernas y apoyarse sobre los brazos y podéis levantaros un poco y moveros mientras seguís fusionados. Estos movimientos conjuntamente con los cuerpos reclinados hacia atrás, permitirán que fluya el corriente sanguíneo hacia la cabeza y que se genere más calor en la zona genital.
• Liberación de los chacras. Si bien esta postura no permite muchos más movimientos y necesita de una fusión especial, facilita una estimulación constante del clítoris y una penetración profunda, que ayuda a que la energía se libere, recorra los chacras y se expanda el placer al máximo.

Claves del sexo tántrico

• A través del sexo, si se practica con conciencia y conexión, se pueden alcanzar grandes sensaciones.
• Las relaciones sexuales son muy lentas y largas. La pareja pone en práctica técnicas de respiración sincronizada, caricias suaves, contacto visual e intimidad emocional.
• Alcanzar el orgasmo no es el objetivo.
• Se busca prolongar el contacto el mayor tiempo posible para sentir una conexión profunda.
• El sexo es una oportunidad de experimentar lo espiritual.
• Practicar yoga como disciplina no es una exigencia, pero ayuda al cuerpo y a la mente a adquirir plasticidad.

Beneficios del tantra

Para personas con pene:

• Mayor control de la eyaculación.
• Experimentar orgasmos múltiples.

Para personas con vulva:

• Aumenta y potencia las sensaciones de placer.
• Acorta el tiempo para alcanzar el primer orgasmo y expande el placer de los siguientes.

Para todas las personas:

• Mayor concentración y duración del deseo.
• Conocer sus propios mecanismos emocionales (y manejar aquellas emociones que atentan contra la conexión con la otra persona como el miedo, el enfado o la ansiedad).
• Experimentar éxtasis durante la relación sexual.

¿Hay que aprender a tener sexo?

La respuesta es sí. No porque haya una forma única de disfrutar el sexo, sino porque gran parte de los malestares y malentendidos que se generan alrededor del sexo vienen del desconocimiento.

En Pink Cabaret no somos expertos del tantra, pero aconsejamos la idea de ir hacia una sexualidad amorosa, empática y en contacto con la otra persona utilizando juguetes sexuales de forma responsable para un completo placer. Elige entre todos nuestros vibradores para mujeres y hombres.