Retomar las relaciones sexuales después del parto no siempre es tarea fácil. Las consecuencias físicas del parto tardan unas cuantas semanas en remitir y el estrés de los padres puede afectar a la libido de ambos.
La llamada «cuarentena» si existe y son muchas las mujeres que no pueden retomar su vida sexual inmediatamente. Aquí les explicamos las razones. Entra y descubre todos los productos de nuestra tienda erótica online.
- El dolor: en el caso del parto por vía vaginal, la región perianal puede quedar lastimada o sensible. Si fue necesaria una episiotomía, ésta causa el dolor propio de cualquier herida
En el caso de una cesárea, si bien tienden a reiniciar su vida sexual un poco antes, padecen el dolor e incomodidad asociados a cualquier operación quirúrgica.
Además, una baja en los niveles de estrógenos, característica de éste periodo, causa sequedad vaginal, lo cual vuelve doloroso el sexo.
En algunos casos, el miedo a que la penetración duela o que pueda causar algún daño provoca tensión en las paredes vaginales, lo que dificulta la penetración y termina, de hecho, volviéndola dolorosa.
- Falta de tiempo y energía: el criar un bebé recién nacido es física y emocionalmente desgastante. El dormir en la misma habitación, todas las tareas que conlleva el bebé y el tiempo que le tienes que dedicar puede inhibirlos.
Esto empeora si hay más hijos a los que cuidar y prestar atención.
- Falta de ganas: En el caso de la mujer, un desbalance hormonal después del parto afecta el deseo sexual. Asimismo, investigaciones han descubierto que cuando el padre carga a su bebé, el nivel de testosterona disminuye, y por ende su deseo sexual.
- La imagen corporal: Especialmente durante el tiempo de postparto se experimentan muchas inseguridades en cuanto a la apariencia física. Es necesario un tiempo para recobrar la confianza y volver a sentir la suficiente comodidad con el propio cuerpo para poder compartirlo con tu pareja.
No es recomendable tener sexo hasta pasadas al menos cuatro semanas, el contacto de alguna herida abierta con el semen incrementa la posibilidad de infección.
Hasta que llegue ese momento en la que el médico da luz verde para retomar las relaciones sexuales, es importante fomentar el coqueteo y la intimidad. Usar braguitas eróticas, coquetearse, besarse, acariciarse, reafirmarse en el amor y la atracción mutua para mantener vivo el interés y abona el camino para que la eventual reanudación de la vida sexual de la pareja sea más fácil y placentera.
Adicionalmente, las caricias y la masturbación mutua pueden ayudar a liberar un poco de la energía sexual acumulada, sin la tensión o el riesgo que puede provocar la penetración. En éste sentido el sexo oral del hombre a la mujer durante las primeras semanas de postparto no es recomendable por el riesgo de las infecciones.
Para cuando ya estéis preparados para mantener relaciones sexuales, aquí dejo algunos consejos:
- Utilizar lubricante de base agua: Para evitar el dolor o incomodidad de la penetración causado por la sequedad vaginal.
- Elegir la posición adecuada: elegir una posición donde el área de la mujer que tiene más sensible o incomoda no se vea presionada. Es mejor si el movimiento lo controla la mujer para que sea ella la que regule la velocidad y el ritmo del movimiento para evitar molestias o dolor.
- El mejor momento: es cuando el bebé acaba de ser alimentado y está durmiendo la siesta. De ésta forma no se está tan cansado como por la noche y hay más chance para disfrutar de un tiempo extra de intimidad.
- Realizar ejercicios Kergel: Ayudan a sanar la herida de la episiotomía o cualquier desgarro más rápido, incrementan la sensibilidad durante la penetración y mejoran la capacidad orgásmica. En este periodo (NO durante el EMBARAZO) son siempre prácticas y recomendables las bolas chinas.
Todo éste proceso es más fácil si somos comprensivos y pacientes como pareja. Mientras más logre la pareja comunicarse, colaborar y cuidarse mutuamente, más fortalecidos salen de ésta etapa.